Proveedores de fitosanitarios tendrían complicaciones operativas si no se autorizan nuevas importaciones

Juan Manuel Fernández | [email protected]

Las empresas proveedoras de fitosanitarios acumulan dos semanas sin conseguir autorizaciones de importación y esperan que el acuerdo con el FMI agilice estos trámites por parte del gobierno argentino antes del fin de semana, para evitar que algunas empresas comiencen a experimentar "procesos muy críticos".

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Así lo planteó Federico Landgraf, director ejecutivo de la Cámara de Sanidad Agropecuaria y Fertilizantes (CASAFE). Aunque aclaró que "todavía no hay desabastecimiento en la cadena comercial", advirtió que en las últimas dos semanas no hubo nuevas aprobaciones para importar, situación que no solo afecta al agro sino a todos los rubros de la economía.

"Esperemos que el acuerdo con el FMI traiga un poco de tranquilidad para abastecer al menos a los mercados de un insumo tan importante", indicó el ejecutivo. Y confió en el sentido común de los funcionarios, ya que desabastecer al sector sería "tirarse un tiro en el pié" debido a que es el principal generador de las divisas que necesita la economía argentina. Al respecto, recordó que por cada dólar que importan las empresas proveedoras de productos fitosanitarios, colaboran a exportar 22 dólares.

En cuanto a los plazos, Landgraf consideró que "son soportables" estos 15 días sin nuevas autorizaciones de importación. Sin embargo, manifestó: "confiamos en que haya aprobaciones esta semana, sino a fin de semana algunas plantas van a comenzar a tener procesos muy críticos".

Al respecto insistió en que el acuerdo con el FMI debería poner en condiciones al país de autorizar nuevas importaciones. Y explicó que, como las importaciones se pagan a plazo, de lo que se apruebe hoy "no salen los dólares mañana sino en 180 días, entonces no debería ser un inconveniente". Aún así, las compañías del sector padecen distintas dificultades, como aprobaciones de SIRA o efectuar pagos de operaciones ya realizadas.

A esta situación se llega tras una primera convulsión que causó la decisión del gobierno de aplicar el Impuesto PAIS a los productos importados. En ese momento, "hubo muchos rumores y se pausó el mercado por unos días; pero hoy estaría normal", aclaró Langraf. También calificó como "bastante disruptivo" el impuesto para el mercado de productos fitosanitarios, "que se caracteriza por ser muy competitivo", por cuanto incrementó considerablemente los costos de las empresas.

En tal sentido mencionó que tuvo un "doble impacto" en la rentabilidad de las compañías. Por un lado, "las empresas tienen que salir a pagar el impuesto PAÍS (7.5%) a operaciones ya terminadas". Y, adicionalmente, como AFIP determinó que se debe anticipar el pago del 95% del impuesto PAÍS se incrementa otro 7.1% ese costo "para lo que trajiste hace 6 meses y lo que vas a pagar dentro de 6 meses".

En este contexto, Landgraf sostuvo que cada empresa se adaptó a su manera. Algunas han absorbido ese costo, pero muchas trasladaron el incremento al producto final. "El acumulado supera el 14%, sólo del impuesto, en productos que se importan", dijo. Y recordó que, incluso los artículos que se formulan en el país, tienen un 80% de componente importado, por lo que "hay un impacto muy fuerte" en la rentabilidad de las empresas.

Mientras tanto, reina la incertidumbre debido a que no hay garantía o seguridad de que el impuesto PAÍS se mantenga en el 7.5%. "Puede llevarse hasta el 30%; y todo eso genera un ruido extraordinario en el mercado, que hicimos llegar a las autoridades nacionales", sostuvo. Y concluyó: "es muy difícil operar en un escenario de tanta imprevisibilidad".